De acuerdo, quizá sean los relojes, el chocolate, las navajas y el queso los productos que han puesto en el mapa a Suiza, pero sin duda este diminuto país cuenta con suficientes atributos como para hacer que su visita valga, y mucho, la pena. Su enorme riqueza paisajística la coloca como una de las naciones más hermosas del planeta. Échenle la culpa a sus innumerables cascadas, lagos, ciudades de cuento de hadas, a su arquitectura espectácular, a los riachuelos que discurren por parajes de embriagadora belleza... Sí señor, la última ‘salida' del Club, organizada por Viajes Fama, ha dado en el clavo.

Suiza es uno de los países más desarrollados del mundo, el país concentra una gran cantidad de inmigrantes procedentes de naciones de varios continentes, por lo que es considerado como uno de los estados europeos con mayor diversidad cultural. De ahí que no sea difícil sentirse como en casa, tal y como experimentó el grupo de cincuenta suscriptores que pudo visitarla entre los pasados 16 y 20 de abril.

Pasaron por Zurich (imponente capital industrial y la ciudad más poblada del país), las cataratas del Rhin (las más caudalosas de Europa), Steim Am Rhein (pueblo medieval en perfecto estado de conservación), Lucerna (la ciudad de los puentes de madera y el magnífico lago de los 4 cantones, con su emblemático monumento del león herido, sus iglesias barrocas y sus casas señoriales), Gruyere (famosa por sus quesos) y Berna (capital suiza) así como otros focos turísticos del país helvético que fueron capturados por los flashes del grupo (las imágenes que ilustran estas páginas dan fe). Pero, además, el grupo realizó diferentes excursiones que redondearon la inolvidable estancia en tierras helvéticas.